Así es el zucchiolo, un híbrido entre pepino y zapallito
Se cultiva en Granada y surgió de investigaciones en biotecnología realizadas por la empresa Beyond Seeds.
Es de aspecto verdoso y forma redondeada, con un brillo suave y de nombre italiano. Se llama zucchiolo y se está cultivando en el sur de España. Concretamente, en la costa de Granada.
“Zucchiolo no es una variedad de zapallito, ni de pepino. Tampoco es un tomate. Se trata de una nueva hortaliza que se produce bajo el sol del sur de España”, explica Beyond Seeds, empresa desarrolladora.
La agricultura en el mundo desafía limites día a día. En este contexto, llega esta hortaliza, que es toda una novedad. Según Beyond Seeds -compañía con sede en Almería, e IFAPA, el Instituto de Investigación y Formación Agraria y Pesquera-, el zucchiolo vio la luz tras cinco años de investigaciones.
Zucchiolo nace “como una novedad y una exclusiva mundial para sorprender a todo el mundo. Es un producto enfocado a su comercialización en el mercado europeo, muy versátil porque se puede consumir fresco en una ensalada como si fuese un pepino, y cocinado como si se tratase de un zapallito”, aseguró el responsable de Marketing y Desarrollo de Producto de Beyond Seeds, Alfredo Sánchez-Gimeno.
Nueva agricultura, ¿cómo es?
A simple vista parece un zapallito redondo, es una hortaliza redonda similar al que se ve en este lado del mundo. Se trata de un nuevo producto, resultado de una especie nueva de la familia de las cucurbitáceas, orientada a cubrir en el mercado una alternativa al zapallito y al pepino, con características de ambos productos.
De piel muy brillante, lisa y firme y con una pulpa crujiente y muy ligera, zucchiolo se destaca por su prolongada vida postcosecha.
Beyond Seeds, responsable del desarrollo de zucchiolo, ya ha creado una página web específica para su nueva verdura. Contiene todo tipo de información al respecto de este nuevo alimento, e incluso contiene un amplio recetario para poder preparar el zucchiolo tanto en fresco como cocinado.
La nueva verdura de laboratorio se puede adquirir en tres sabores y colores distintos (verde claro, verde oscuro y amarillo). La amarilla es la más personal porque es la que menos recuerda al zapallito.“Tiene una riqueza de color donde la tonalidad amarilla es la más dulce y diferencial en el mercado mundial”, detalló Sánchez-Gimeno.
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