Economías Regionales

Las exportaciones de cebollas crecieron 8% en 2023

En estos primeros ocho meses del año se colocaron en el exterior, desde la zona protegida, cerca de 133.000 toneladas de cebollas. Brasil, sigue siendo el principal destino de la oferta exportable argentina.

Las exportaciones de cebollas desde la Región Protegida Patagónica (RPP), al cierre de agosto del corriente año, totalizaron las 132.972 toneladas, volumen que refleja un crecimiento del orden del 8% respecto del mismo período del año anterior, y del 5% cuando se lo relaciona con el promedio de colocaciones de las últimas cinco temporadas.

Así lo refleja un reciente estudio elaborado por la Fundación Barrera Zoofitosanitaria Patagónica (Funbapa) en el que se destaca que poco más de 93.000 toneladas de cebollas fueron controladas y certificadas para exportar por parte de este organismo. Los técnicos del programa rechazaron 953 toneladas en los empaques por exceder los porcentajes de defectos establecidos en la normativa, principalmente por exceso de podredumbre.

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Un punto importante de destacar es que la Región Protegida Patagónica, que se localiza en la región productiva de Río Negro y del sur de la provincia de Buenos Aires, concentra, en promedio, el 90% del total de las exportaciones argentinas de cebollas.

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Hoy en todo el Valle inferior y Valle Medio de Río Negro, se estiman que existe una superficie de poco más de 6.000 hectáreas plantadas con cebollas, y mucha de esa producción es la que se orienta a las exportación. A nivel nacional, en promedio, se cultivan anualmente alrededor de 21.000 hectáreas de cebollas. Unas 9.000 se las ubica en el sur de Buenos Aires. Hay que destacar que, si bien en la presente temporada, las exportaciones desde la RPP crecieron 8% en términos interanuales, lejos están de las colocaciones de los primeros ocho meses de 2006 cuando tocaron las 227.000 toneladas.

Destinos

Los datos suministrados por la Funbapa detallan, en otro de sus párrafos, que Brasil es el principal destino de la oferta exportable de cebolla argentina, concentrando cerca del 80% de las compras externas de nuestro país.

Las estadísticas reflejan que, en estos primeros ocho meses del año, se colocaron en el vecino país poco más de 104.790 toneladas, de las cuales 103.096 toneladas (98,3%) salieron de la zona protegida.

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Nueva temporada

Tomando los últimos informes públicos y privados todo indica que la nueva temporada de cebolla que se avecina para el sur de Buenos Aires y Río Negro, región que concentra el 70% del total de la oferta comercial del producto en el país, no tendrá grandes sobresaltos.

El principal argumento para esta afirmación son las mermas esperadas sobre la cosecha de cebolla en el sur de Brasil, variable clave a la hora de definir el volumen de exportación hacia ese país.

Sobre este punto hay que señalar que Brasil importa en promedio un promedio de 100.000 toneladas por año; con picos de máxima de más de 200.000 toneladas (como fue el 2013) y pisos de menos de 50.000 toneladas (como ocurrió en la campaña 2017). Como se ve, la elasticidad que presenta el producto en el mercado es muy alta. Estos extremos que se observan en las exportaciones argentinas al vecino país, están relacionados con la oferta de producción que presenta el sur de Brasil.

Para la temporada que se avecina, las primeras estimaciones dan cuenta que los efectos de El Niño han dejado sus huellas en el campo. Las proyecciones estiman importantes mermas en la cosecha de cebolla en toda la región del sur de Brasil.

Ya lo había anticipado a +P el Ingeniero Agrónomo Daniel Iurman, especialista del INTA Hilario Ascasubi, al señalar que “es importante analizar las estadísticas. Los efectos de El Niño generalmente han estimulado las exportaciones a Brasil; los de La Niña, al revés. Hoy estamos frente al primero de los escenarios, por eso se puede pensar que habrá oportunidades para colocar el producto argentino en el mercado brasilero”. Sin embargo, agrego: “Hilando un poco más fino, si se definen pérdidas en el sur de Brasil anticipadamente, en octubre o noviembre, la respuesta del nordeste se podría activar más temprano. Ellos pueden sembrar cebollas de ciclos muy cortos, a partir de los 120 días o menos. De todas formas la calidad de nuestro producto debe ser siempre la diferencia”, agregó Iurman, en otra parte de la conversación.

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