Crece el comercio electrónico de vinos y hay debate

Desde 2020 avanza el e-commerce de vinos y las vinotecas levantan una bandera de alerta.

El crecimiento del comercio electrónico de vinos avanza a paso firme en Argentina. Desde 2019 se registra un crecimiento sostenido del número de bodegas que se suman a la venta online, y en 2020 (en tiempos de cuarentena) se profundizó la tendencia.

Según la Cámara Argentina de Comercio Electrónico (CACE), en 2022 más de 21 millones de personas realizaron al menos una compra online al mes, habiéndose incorporado durante ese año más de un millón de nuevos compradores.

A la hora de encontrar las razones de la tendencia, surgen varias cuestiones. La sencillez en el proceso de compra, la velocidad y el ahorro de tiempo son algunas de las variables que motivan la elección del canal virtual. Incluso en 2022, tras la vuelta a la normalidad, la facturación por ventas online en el rubro alimentos y bebidas creció 86% respecto de 2021.

Polémica en puerta

Esta tendencia, que parece afianzada, abre un debate en las vinotecas. Desde la Cámara Argentina de Vinotecas y Afines (CAVA) plantearon su preocupación ante lo que consideran "una nueva inconsistencia en la política comercial del sector que redundará no sólo en rupturas, sino que también en llevar desconcierto al mercado acerca de cuál es el precio real del vino de cara al consumidor".

Según la entidad, "esta decisión afecta significativamente a las vinotecas y negocios asociados, quienes son parte fundamental del desarrollo y promoción de los vinos a diario".

"Las vinotecas somos un nexo crucial entre las Instituciones, los productores y los amantes del vino, generando un entorno de confianza y conocimiento que enriquece y garantiza la experiencia de consumo", aseguraron en un comunicado.

Para los vinotequeros, "esta conducta genera confusión, se aleja de prácticas de comercio justo y conlleva imprecisiones en los precios de referencia, lo que socava la confianza de los consumidores".

"Los efectos se extienden más allá de nuestras empresas y empleados, y también afectan negativamente el arduo trabajo que realizamos para promocionar y destacar los vinos argentinos en el mercado local", lamentaron.

Por ello, solicitaron a las bodegas que "reflexionen sobre las consecuencias de la acción y que revisen el enfoque comercial", y confiaron en poder "encontrar una solución que fortalezca nuestra industria y promueva el valor del vino argentino en el mercado".

Fuente: Telam

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