La batalla por Ganancias: ¿Cómo quedará la tabla salarial?
Diputados insiste en que los asalariados deben pagar el Impuesto a las Ganancias. La tabla que muestra cuánto deberán ceder los asalariados.
Marchas y contramarchas. Eso es lo que se observa en el Congreso para la aprobación de la Ley Bases. Como parte del acuerdo entre el oficialismo y los bloques de la oposición dialoguista se resolvió aceptar todas las modificaciones que hicieron los senadores a excepción de tres puntos. La restitución de la cuarta categoría del Impuesto a las Ganancias sigue siendo la cuestión más problemática. Justamente por eso los gobernadores de Juntos por el Cambio también se involucraron personalmente en las negociaciones y ayer se reunieron con referentes de diferentes bloques para dejar en claro su interés en que se insista con la versión del proyecto que salió de Diputados.
Ese artículo fue rechazado en el Senado por 41 votos en contra contra 31 a favor. La versión de la Cámara Baja proponía subir el mínimo no imponible a 1,8 millones de pesos brutos para los solteros (en términos netos, es un salario de 1.494.000 pesos). En el caso de un empleado que tenga cónyuge y dos hijos menores de 18 años declarados a su cargo, el salario bruto más bajo alcanzado por el impuesto sería de 2,3 millones (equivale a un sueldo neto de 1.981.278 pesos). Y si -por dar otro ejemplo- se trata de un empleado que deduce dos hijos menores (y no cónyuge), tributará a partir de una remuneración de 2.057.405 pesos (que equivale a un neto de 1.738.683 pesos).
Así, volverían a pagar este tributo alrededor de 800.000 trabajadores con alícuotas que van del 5% al 35%. Y así quedaría la tabla que impulsa la Cámara Baja.
El proyecto preveía asimismo que tanto, la actualización del mínimo se haría de forma trimestral durante este año, en septiembre, y luego de forma semestral a partir del Índice de Precios al Consumidor (IPC).
La restitución del impuesto a las Ganancias es rechazada de forma enfática por los gobernadores de la Patagonia ya que quedarían alcanzados gran parte de sus trabajadores del ámbito privado y estatal debido a que tienen sueldos altos por el régimen salarial de las zonas desfavorables y las actividades que realizan.
Al mismo tiempo, algunos diputados dialoguistas de provincias gobernadas por el peronismo manifestaron algunos reparos porque entienden que “pagarán el costo político” de subir el impuesto mientras que beneficiarán a gobernadores con los que compiten en el territorio y que encima mandan a sus legisladores a votar en contra.
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