Positivo: la AFIP redujo las presentaciones anuales para los productores
La medida de la AFIP reduce la cantidad de presentaciones y beneficiará a cerca de 100.000 productores.
En el marco de un proceso general de simplificación de su normativa y de regímenes de información existentes, la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), junto con el Ministerio de Economía, dictaron la Resolución General Conjunta 5510, con el fin de disminuir en forma relevante la cantidad de presentaciones anuales que deben realizar los productores agrícolas dentro del Sistema Integral de Simplificación Agrícola (SISA).
Esta medida beneficiaría a cerca de 100.000 productores agrícolas, eliminando tres declaraciones juradas (DDJJ) anuales. Menos burocracia para el productor.
El SISA está diseñado para unificar la información sobre la superficie sembrada y la producción de granos y semillas que es relevada por distintos organismos (INASE, SENASA, Secretaría de Bioeconomía y AFIP), reemplazando en su momento a los Registros y Regímenes Informativos vinculados a la actividad de producción y comercialización de granos y semillas en proceso de certificación (cereales y oleaginosas) y legumbres secas.
A partir de esta medida, los productores realizarán dos presentaciones juradas al año en lugar de cinco. Quedan vigentes la presentación de la información de las existencias y de la capacidad de producción por campaña agrícola. La Información Productiva 1 (IP 1) se presenta en el mes de octubre de cada año respecto de la existencia de productos específicos y la Información Productiva 2 (IP2) es la superficie agrícola destinada a ciertos cultivos, que debe informarse entre los meses de diciembre y febrero de cada año.
En ese sentido, se han eliminado las declaraciones anuales de existencias de trigo respecto a las variedades detalladas (IP 3) y dos declaraciones de producción de granos (IP 4 e IP 5).
La AFIP y el Ministerio de Economía, a través de la Secretaría de Bioeconomía, avanzaron en esta decisión conjunta al entender que se trataba de un requerimiento excesivo, sin beneficios para los productores, ya que la obligación debería cumplirse “aun cuando el sujeto obligado no disponga, al momento de suministrar la información, de existencia de trigo o de producción de granos y semillas en proceso de certificación”. Dentro de la reglamentación se encontraban alcanzados los contribuyentes que en forma complementaria a su actividad principal producían granos y semillas en proceso de certificación -cereales y oleaginosas- y legumbres secas.
La reducción en la cantidad de presentaciones anuales dentro del Sistema SISA representa un paso significativo hacia la simplificación normativa para los productores agrícolas y busca aliviar la carga administrativa de los productores agrícolas sin comprometer la eficacia y la trazabilidad en el sistema agrícola. Esta medida no afecta la trazabilidad ni el control sobre el comercio de granos y semillas, para lo cual se realizó una readecuación de los regímenes vigentes.
Medidas de la AFIP, bien recibidas
La medida es bienvenida por el agro, asegura indica el experto el contador y experto en temas del agro Bernando Ciancaglini, y agrega que los regímenes de información derogados eran generadores de problemas vinculados con cruces de datos sistémicos que dificultaban la operatoria normal y habitual del comercio de granos.
Se verificaron muchos inconvenientes, entre otros, la imposibilidad de emisión de liquidaciones primarias de ventas de granos y también en el otorgamiento de cartas de porte para efectuar las entregas de la mercadería. "Esta situación generaba incumplimientos contractuales con cargos a costa del productor, como la imposibilidad de cancelación de saldos, incumplimientos en entregas, incumplimientos sobre operaciones de canjes; e incursión en gastos administrativos; sin dudas todas pérdidas innecesarias que afectaban directamente al sistema económico de los productores primarios", afirmó.
Por último destacó que, si bien el sector es uno de los más controlados de la economía, la presente medida ayuda al productor primario y mejora sustancialmente la carga burocrática que tales regímenes de información suponían.
En esta nota