¿Está barato hoy el dólar en torno a los 1.100 pesos?
Muchos operadores aseguran que es momento para la dolarización de activos en pesos. Proyectan un mercado de cambios estable para el corto plazo.
“Si compras hoy dólares y te parecen que los pagaste caros, mañana por el precio al que lo compraste ya te va a parecer barato. Esos siempre es y será así en la Argentina”, confiaba un operador del mercado, instalado cómodamente en sus oficinas de la ciudad de Neuquén, en una charla informal con +P.
Pese a que en el último año la situación no fue tal, la estadística histórica no lo contradice. Medido siempre en largo plazo, la mayor parte del tiempo la divisa norteamericana creció a tasas superiores de lo que lo hizo la inflación. Obviamente que existieron otros activos con mayores rendimientos, pero también con mayores riesgos, a los que no está habituado el ahorrista tradicional medio argentino.
Sin embargo, se puede anticipar que, por lo menos en lo que al corto plazo se refiere -esto es los próximos 15 días al menos- el dólar se mantendrá sin grandes saltos, según destacan distintas voces del mercado. Es una cuestión de expectativas. Se espera que el mercado se encuentre relativamente abastecido por los escalonados ingresos de divisas de los próximos meses y la salida de pesos a través de la colocación de nuevos bonos. Y esto quita presión al tensionado sistema. Los argumentos:
- El acuerdo que pudo cerrar la semana pasada el Gobierno con el Fondo Monetario Internacional (FMI) llevó algo de tranquilidad sobre la divisa norteamericana, pese a que los operadores son conscientes que la mayor parte de los más de 4.700 millones de dólares que ingresaran al país en esta primera parte del año serán destinados a pagar compromisos con los distintos organismos internacionales. Muy poco quedará para una posible intervención en el mercado, si existe una mayor demanda de dólares de lo esperado.
- Algunos ven en el corto plazo una distensión de los dólares financieros tras el buen resultado de la tercera licitación del bono que ofrece el Banco Central por la deuda que mantiene con los importadores (BOPREAL), en la que se adjudicaron la semana pasada unos 1.180 millones de dólares, lo que implica un notable mayor interés frente a los escasos 68 millones colocados en la primera suba y 57 millones en la segunda.
- A partir de abril (un siglo para la argentina de hoy) comienza el ingreso fuerte de dólares proveniente de la cosecha gruesa, estimado en torno a los 26.000 millones de dólares lo que terminará por fortalecer las reservas del Banco Central.
Estos tres elementos han generado sobre el mercado cierto grado de previsibilidad, algo que no se veía hace tiempo en la plaza cambiaria. ¿Significa que los dólares del sistema financiero no sufrirán cambios? Sus precios están en un precario equilibrio. Quiere decir que cualquier variable que pueda llegar a aparecer, los puede volver a la volatilidad de semanas atrás.
La brecha se mantendrá en los niveles del 30% al 50%, un valor relativamente predecible para esta etapa de la gestión de Javier Milei, aunque a partir de abril esta relación debería volver a ubicarse más cerca del piso del 30% que del techo del 50% para confirmar que los objetivos prefijados por Luis Caputo tienden a cumplirse.
¿Cómo se moverá el dólar oficial?
Las principales dudas están centradas en como se moverá el dólar oficial, el corazón del problema de la economía argentina y es dónde tienen que mirar los ahorristas a la hora de analizar la posibilidad de dolarizar sus ahorros.
El Gobierno anunció, tras el ajuste que llevó la divisa oficial a los 800 pesos, que la devaluación iba a ser a una tasa del 2% mensual agregando semanas después que “en abril se iba a revisar la medida”. Si tenemos en cuenta que, para el cuatrimestre diciembre-marzo se espera una inflación acumulada superior al 60%, los 800 pesos ajustados al 2% mensual es una total utopía.
En este contexto, es probable que el Gobierno antes de abril realice otro fuerte ajuste sobre la divisa oficial para llevarla seguramente arriba de los 1.000 pesos por unidad. En el mejor de los casos, el dólar blue y los financieros se ubicarían, tras esta nueva paridad oficial, en torno a los 1.350 pesos. En el peor de los escenarios, arriba de los 1.500 pesos.
En definitiva, la pax cambiaria está asegurada para el corto plazo, no más de los próximos 15 días. En todo este breve tiempo el ahorrista puede buscar inversiones en pesos con bajo riesgo no más allá de los límites mencionados. A partir de febrero, en la medida que uno se mantenga con inversiones en pesos para ganarle al dólar, los riegos aumentarán con el paso de los días.
Son momentos muy delicados cuando la economía se acomoda con sus precios relativos. Por lo tanto, un ahorrista tradicional medio, no debería pensar tanto en como obtener altas tasas de rentabilidad, sino conformarse en mantener el capital, lo que sería en este escenario todo un logro.
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