El precio de la manzana sube 24% en Europa: los gráficos que lo explican
El precio promedio del kilo de manzana en Europa alcanzó niveles récord, con subas interanuales del 11% y 24% del promedio de las últimas cinco campañas.
Especial (Madrid/París/Berlín).– A pocas semanas del inicio de una nueva cosecha de manzanas en la Unión Europea (UE), el balance de la campaña 2024/2025 ofrece resultados muy positivos para los productores y operadores del sector. Según un reciente informe de la Dirección General de Agricultura y Desarrollo Rural de la Comisión Europea, los precios promedios pagados a los productores cerraron el mes de junio en 1,07 euros por kilo, marcando un incremento interanual del 11% y un 24% más alto que el promedio de los meses de junio de las últimas cinco campañas.
Este dato, que representa un récord de los últimos años, confirma una temporada con márgenes sólidos, impulsada por una oferta controlada y una demanda estable. El informe toma como referencia los mercados de Francia, Alemania, Italia y Polonia, principales actores del sector manzanero europeo, que en conjunto marcan la tendencia de precios dentro del bloque.
“Fue una campaña con buenos precios finales. La demanda se mostró activa y la oferta, clave en la presente temporada, fue apareciendo en el mercado en forma ordenada sin generar presiones sobre el mismo”, explicó un reconocido importador europeo en diálogo con +P.
Además de los buenos precios pagados a los productores, los valores también se reflejaron en los supermercados. Las manzanas de mayor calidad —especialmente las nuevas variedades premium— llegaron a superar los 5 euros por kilo en el punto de venta, aunque el rango promedio se ubicó entre los 2,5 y 4 euros, cifras significativamente superiores a las de la campaña pasada.
Con la mirada puesta en la campaña 2025/2026, los analistas consultados se muestran cautelosos. Las primeras proyecciones indican que los precios tenderán a estabilizarse o incluso a la baja una vez que la nueva cosecha comience a ingresar al mercado.
“Todo va a depender de los volúmenes y calidad a esperar. Por lo pronto, el clima no está ayudando mucho. En el norte de Europa, las lluvias y la falta de calor podrían afectar el color de la manzana. En el sur, las altas temperaturas también podrían tener efectos negativos sobre la calidad. Hay que esperar un par de semanas más para saber cómo puede llegar a venir la campaña”, agregó la misma fuente.
Francia, líder de precios en manzana
En el análisis por país, Francia se consolida como el mercado con mayores precios promedio. En junio, el valor alcanzó los 1,39 euros por kilo, cifra que se mantendría en el mismo nivel para el cierre de julio. Este monto está un 30% por encima del promedio del bloque europeo, aunque la variación interanual fue más moderada: +4,5%, frente al 11% del promedio de los cuatro países analizados.
La estabilidad francesa responde a una estructura de mercado más consolidada, con marcas reconocidas, fuerte presencia de variedades de alto valor agregado y políticas de promoción eficaces. Además, los productores franceses han avanzado en sistemas de certificación y sostenibilidad, lo que permite acceder a mejores precios en el canal minorista.
Polonia sorprende con una suba récord en manzana
En el extremo opuesto, pero igualmente destacable, se encuentra Polonia, el principal productor de manzanas de la UE en términos de volumen. Allí, los precios promedio pagados al productor en junio fueron de 1,01 euros por kilo, una cifra que representa un salto interanual cercano al 60%, tanto en comparación con junio de 2024 como con el promedio de las últimas cinco campañas.
Hasta mayo, el mercado polaco venía mostrando precios estables entre 0,60 y 0,70 euros por kilo, pero un repunte repentino en junio impulsó el valor a niveles históricos. Este fenómeno estaría relacionado con una combinación de reducción en la oferta interna y mayor dinamismo exportador, sumado al interés de mercados vecinos por fruta de calidad intermedia a precios competitivos.
Italia: estabilidad con tendencia al alza
En Italia, otro gigante del sector manzanero, los precios también fueron positivos. El informe destaca que el valor promedio de junio fue de 1,01 euros por kilo, una leve suba respecto de mayo y un incremento interanual del 2%. Aunque este porcentaje podría parecer modesto frente al salto polaco, al compararlo con el promedio de las últimas cinco campañas, los precios italianos siguen siendo significativamente altos.
Italia continúa consolidándose como proveedor clave de manzanas de alta calidad, con una fuerte presencia en los mercados de exportación del Mediterráneo y Oriente Medio. La diversificación varietal y la inversión en tecnologías de conservación han contribuido a sostener precios estables incluso en temporadas desafiantes.
Alemania: crecimiento sostenido
En Alemania, el valor pagado al productor fue de 0,95 euros por kilo en junio, con un crecimiento interanual del 17% y del 35% respecto al promedio de los últimos cinco años. Este mercado, que tradicionalmente ha sido más conservador en sus precios de compra, ha mostrado en 2025 una curva de crecimiento más consistente.
Según los analistas, el alza responde tanto a una disminución de oferta interna como al encarecimiento de las importaciones provenientes de otras regiones. Alemania ha sido uno de los países más afectados por los costos logísticos y por las fluctuaciones cambiarias, lo que ha repercutido directamente en los precios finales.
Un cierre positivo, pero con desafíos a futuro
Para la mayoría de los operadores consultados, la campaña 2024/2025 puede considerarse un éxito, tanto en volumen de ventas como en retornos económicos. Además, los exportadores del hemisferio sur —Chile, Argentina, Nueva Zelanda, entre otros— también encontraron un contexto favorable para colocar su producción, impulsados por la depreciación del dólar frente al euro, lo que aumentó su competitividad en el mercado europeo.
Sin embargo, el futuro inmediato plantea interrogantes. El cambio climático, con fenómenos extremos tanto en el norte como en el sur de Europa, podría afectar la calidad y cantidad de la próxima cosecha. Además, los consumidores europeos, presionados por la inflación y la pérdida de poder adquisitivo, podrían modificar sus patrones de compra, afectando el consumo de frutas frescas premium.
Con estos elementos sobre la mesa, la campaña 2025/2026 se perfila como una temporada de incertidumbre, en la que la gestión de calidad, la adaptación climática y la estrategia comercial serán claves para sostener la rentabilidad alcanzada en este último ciclo.
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