El proyecto agrícola de Miguel de Larminat está dando frutos
Miguel es un productor ganadero que puso en marcha un proyecto agrícola innovador, único en la zona de la precordillera neuquina. En junio nos contó cómo fue el comienzo, en octubre nos compartió cómo avanzaba y ahora, nos alegra mostrándonos los resultados.
“Yo tengo confianza, creo que va a salir adelante”, nos dijo Miguel de Larminat en junio. Por aquellos días, este ganadero neuquino estaba en el medio de un proyecto innovador de agricultura en zona del aeropuerto de Chapelco.
En ese momento, nos contaba que “el pasto que nosotros tenemos en los valles de la precordillera es insuficiente. Hicimos un canal en la zona del aeropuerto de Chapelco, y regamos un lugar que era muy seco y muy malo, con poca producción de pasto. Así nació todo esto, en 2021”.
Y “todo esto” avanzó a tal punto ahora vemos rollos de avena en el campo. “Es la primera cosecha de la chacra nueva. Ahora vamos sembrando otros pastoreos y forrajes para el otoño”, nos cuenta mientras lo imaginamos mirando cómo avanza el proyecto que ideó su padre y que puso en marcha hace 2 años.
“En el año 2021 hicimos el canal. En el 22 empezamos con la nivelación de esta área que quedó bajo el canal, y estamos bastante avanzados ahora. Largamos la primera experiencia de riego, ya terminamos toda la superficie que habíamos reservado para esta etapa, y sembramos todo. Prendió todo bastante bien”.
En octubre, se veía como el paisaje se teñía de verde de a poco y Miguel nos decía “los resultados están viniendo despacito”.
-Yo tengo confianza, creo que va a salir adelante.
-Me quedo con eso…
-Sí, sí, estas cosas son siempre así, más cuando uno tiene como socio inevitable a la naturaleza de la Patagonia que hace lo que quiere.
“La verdad es que me genera mucha satisfacción poder seguir avanzando. Es muy poco común en nuestra región pasar de ser un puro criador de hacienda a ser de alguna manera un agricultor”.
“Lástima que no se puedan envolver en plástico como se hace en otros países, permite una mucho mejor conservación y también aprovechamiento. Pero el precio es prohibitivo”.
Empezó con fotos de maquinaria en medio de una verdadera polvareda y ahora tenemos rollos y rollos de pastura para el engorde. Como nos dice Miguel, “Si, ¡es impresionante! ¡Hay que perseverar nomas!”.
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