Las restricciones en el Canal de Panamá llegarían hasta el 2025
Los problemas en el Canal de Panamá complicarán parte del comercio de frutas de Chile y Perú que se orientan a los mercados del Atlántico.
Las limitaciones de tránsito por el Canal de Panamá, debido a la fuerte sequía que enfrenta el país centroamericano, podrían extenderse al menos hasta febrero del próximo año, pudiendo afectar el transporte de frutas de países Latinoamericanos que usan esta vía para comercializar su productos en Europa y la costa Este de los Estados Unidos.
En una entrevista con la agencia The Associated Press (AP), el administrador de la vía panameña, Ricaurte Vásquez, dijo -ayer martes 13 de febrero- que mantendrán la restricción a 24 tránsitos diarios al menos hasta abril de este año, por debajo de los 36-38 en tiempos normales. “Si llueve”, apuntó, entonces podrán empezar a escalar hasta llegar a la normalidad. Este escenario de normalización no se dará posiblemente hasta esta misma época de 2025, explicó. Se trata, sin embargo, de un escenario del que tendrán mayor certeza entre el 15 al 20 de marzo cuando realicen el pronóstico meteorológico de los próximos 45 días, que tiene un 75% de confiabilidad, indicó.
Gran parte del comercio de frutas de países Latinoamericanos pasa por esta vía rumbo a los mercados de Europa, la Costa Este de los Estados Unidos y Medio Oriente. En el caso de Chile, las exportaciones que transitan por el canal han disminuido en las últimas cinco temporadas, aunque siguen representando el 48% de las colocaciones totales de frutas del país. En el caso de Perú, hasta el 60% de su comercio frutícola pasa por este estrecho.
El tiempo de tránsito añadido también es un problema para la fruta fresca, sobre todo la procedente de países como Chile y Perú. La temporada de cerezas en Chile alcanzan su peak en enero, y las uvas, ciruelas, nectarinas y arándanos están teniendo dificultades para llegar al mercado.
¿Esta crisis puede ser una oportunidad para el Valle de Río Negro y Neuquén? La mayor parte de los empresarios consultados aseguran que tanto Chile como Perú tienen alternativas para sortear el problema. "Toda la primicia de sus principales productos frutícolas llega por avión, un transporte que está aumentando su participación en el comercio de ambos países", aseguró uno de los ejecutivos consultados.
Pero donde ven alguna ventaja es en los tiempos que gana el Valle al tener sus costas de cara al Atlántico. "Por supuesto que con nuestras salidas por Buenos Aires, Bahía Blanca o San Antonio Este, no tenemos este tipo de problemas con nuestras cargas de frutas. Ahí podemos tener una mejora competitiva en los tiempos de llegada al mercado, en especial sobre el mercado europeo", adelantó otro de los empresarios consultados.
Histórica bajante en el canal de Panamá
El Canal de Panamá se vio obligado por primera vez en su historia en septiembre del año pasado a tener que limitar el número de barcos que atraviesan la ruta a diario, debido a la peor sequía que redujo el nivel de los lagos. Estos alimentan las esclusas que permiten cruzar los barcos de un océano a otro, siendo el punto más crítico en diciembre cuando sólo pudieron cruzar 22 barcos.
La vía comercial opera con agua dulce, que llega de los lagos Gatún y Alajuela y que a su vez son los que suministran el consumo humano a más de la mitad de los cuatro millones de panameños. “Posiblemente en los próximos seis meses, nosotros podamos terminar de hacer un análisis que dé un mayor grado de certeza a la industria”, adelantó Vázquez a AP. Ese estudio indicará cuánto volumen se garantizar que transitará por el Canal de Panamá y cuáles podrían ser, dependiendo de condiciones variables, los volúmenes adicionales. “Eso cambia toda la forma en que nosotros hacemos negocio, cuántas reservaciones se van a poder hacer y con cuánto tiempo lo van poder hacer”, subrayó.
No obstante, el responsable de la vía reconoció que es consciente de que, aunque el Canal puede dar confiabilidad a quienes reservan dentro de los 24 espacios diarios que se abren, el país y la ruta pierden esa misma confiabilidad al no tener una solución más a largo plazo.
Otros de los retos que el Canal de Panamá enfrenta, no es ni climático ni de infraestructura, es político. La administración del Canal de Panamá, en septiembre de 2023, le entregó al gobierno de Panamá la propuesta para solucionar el tema a largo plazo, que incluía definir la Cuenca Hidrográfica del Canal y modificar o ampliar los límites. Además, eliminar las restricciones impuestas al canal para la construcción de nuevos embalses.
Una opción que se baraja desde hace años es hacer un embalse en un caudaloso afluente, conocido como río Indio. Sin embargo, la administración del gobierno actual, que termina el próximo 30 de junio, no contempla hacer estos ajustes. “La conversación nuestra con el Gobierno central es que ese tema no se va a tocar en lo que resta de esta administración”, afirmó la autoridad del Canal.
Los responsables de la infraestructura comercial se están reuniendo con los candidatos presidenciales de los comicios del 5 de mayo para hacer acercamientos y buscar esa alternativa a largo plazo. Entre tanto, se hacen monitoreos y utilizan muchos datos sobre el comportamiento del clima y en especial de las lluvias, en busca de reducir la salinización del agua, con el objetivo de aumentar el número de buques que pueden manejar en una situación como la actual y llevarlos a más de 24 tránsitos. “Nosotros seguimos encontrando y buscando soluciones técnicas que nos permitan resolver el tema de la operación del Canal”, dentro de sus limitaciones actuales, dijo. También planean hacer mejoras en cuanto a infraestructuras y algunos de estos proyectos necesitan inversiones altas. Ejecutivos del Canal de Panamá, incluyendo a Vásquez, se reunieron hace unos días en Estados Unidos con representantes de los Fondos de Inversión de infraestructura y bancos de inversión en busca de posibilidades de financiamiento o de concesionar algunos proyectos que les ayuden a mejorar la situación.
Un ejemplo de estos proyectos es para el segmento de los barcos graneleros, que es uno de los que más ha sufrido por la reducción de tránsitos y con quienes ya se han reunido. Están proponiendo construir silos de almacenamientos en el Pacífico para tener una operación que saque al menos un tránsito al día.
Ante la restricción en la vía comercial, la Naviera Maersk anunció que pasaría parte de su carga de forma terrestre por el ferrocarril de Panamá. Sobre esta decisión, Vásquez dijo que “nosotros no vemos la operación logística como una amenaza a la operación del Canal de Panamá, sino como complemento”, aunque insistió en que la ruta marítima es la mejor opción para el movimiento de carga.
Fuente: AP con aportes de redacción +P.
En esta nota