Vino

La filosofía del vino: los vinos de montaña versus los vinos del llano

Cómo la singularidad del lugar se traduce en el carácter del producto en la copa. Un ejercicio lúdico que propone el deleite en el paladar.

Llevo tiempo dándome cuenta de que hay vinos que reflejan el espíritu del lugar. Están aquellos tintos que expresan el carácter solar de los desiertos, entre frutas negras y riqueza de paladar; otros que traducen las piedras del suelo como una composición lúdica entre concentración y agilidad; y unos pocos que combinan los climas fríos y esteparios con una expresión austera y llena de matices. Eso solo por mencionar tres puntos relevantes.

Leía hace poco un libro muy singular de un autor húngaro llamado Béla Hamvas (Cuadernos del Acantilado #64, $21.500, traducción de Adan Kovacsics). Al leerlo recordé aquella observación del matemático John von Neumann, quien decía que, a los físicos húngaros en los laboratorios de Los Álamos —donde se desarrolló la bomba atómica—, los llamaban “los extraterrestres”. Y eso que estaban entre raros. Este libro de Béla Hamvas podría cuadrar en esa descripción.

En 128 páginas recoge el pensamiento de este autor sobre el vino, los ateos, los pietistas y el arte de vivir, con una crítica mordaz a los mojigatos y lloricas. Para ponernos en contexto: Hamvas era un bibliotecario conocedor de los vinos húngaros y mediterráneos —entiéndase Croacia, Montenegro e Italia en su visión—, donde frecuentaba tabernas en busca de buen pescado y vinos que ajustaran su sabor y saciaran su sed.

image
Vinos con espíritu: De los tintos solares a los austeros de climas fríos, el carácter del lugar se bebe en la copa. Reflexiones sobre Béla Hamvas.

Vinos con espíritu: De los tintos solares a los austeros de climas fríos, el carácter del lugar se bebe en la copa. Reflexiones sobre Béla Hamvas.

En su vida, la defensa del arte abstracto —en contraposición al arte político— lo llevó a que el régimen estalinista lo condenara al ostracismo y le prohibiera publicar hasta su muerte, en 1968, de un trágico derrame cerebral mientras cargaba el mortero en una fábrica de Tiszapalkonya. Para ese momento, Béla leía y hablaba sánscrito, latín, hebreo y griego antiguo, además de alemán, húngaro y ruso. Tenía 71 años.

Erudición aparte, lo que me pareció fascinante de su Filosofía del vino es la forma en que se refiere a los blancos, tintos y vinos dulces húngaros: los trata como criaturas dueñas de una forma particular de vida, como duendes que le susurran cosas a los labios del bebedor. En esas disquisiciones, propias de un Felisberto Hernández extraterrestre, Béla Hamvas llega a una conclusión que, creo yo, se aplica a todos los vinos del mundo.

El llano versus la montaña

En el libro, Béla reserva un capítulo al vino como naturaleza. En él, se esfuerza por catalogar los vinos húngaros en distintos estamentos. Estaba en esa lectura tan singular cuando me topé con esta reflexión:

“El del llano es el vino terapéutico para las heridas de la vida más sencillas. Si encuentras en la fonda a un hombre atormentado por una esposa rezongona y malvada, verás que está bebiendo vino del llano. Cuando el joven estudiante se sume en la melancolía a causa de una pena secreta, bebe vino del llano. Si ves a un hombre sin afeitar, con la camisa arrugada, verás que toma vino del llano. Y hace bien. El vino de montaña solo sirve para enfermedades graves, por ejemplo, cuando alguien lucha contra ciertos pecados o quiere vencer la mortífera acidia en su interior. Pero sobre todo está reservado a quien sufra la enfermedad del idealismo, a cualquiera que crea haber resuelto los problemas de la vida gracias al saber. No basta con saber las cosas. Hay que hacerlas realidad. El vino es el gran realizador”.

Más allá del concepto moral que refleja, es interesante observar cómo el carácter del lugar se traduce en el carácter del vino: el llano, la simpleza; la montaña, el idealismo.

image
Filosofía del vino: El escritor húngaro Béla Hamvas y su visión lúdica: el vino del llano para las penas sencillas y el de montaña contra el idealismo. 

Filosofía del vino: El escritor húngaro Béla Hamvas y su visión lúdica: el vino del llano para las penas sencillas y el de montaña contra el idealismo.

Algo de eso se observa cuando se beben vinos de montaña en comparación con los del llano. Y hablo aquí desde el Valle de Uco hasta Priorat, desde Sonsierra hasta los Valles Calchaquíes. Pero lo más interesante de la descripción es el valor del vino para el espíritu. Unas páginas más adelante, leo:

“¿Y qué podemos decir de los vinos de montaña? Empezaré por el de Gyöngyös. Es un vino bien engalanado. Tiene todo lo necesario para dar una buena impresión. Además, es un buen anfitrión, un agradable conversador, a menudo ingenioso. En su caso, los años empiezan a cobrar importancia. A más edad, más fogoso, igual que cualquier alma que madura como es debido. Es ideal para los pogácsa (un pan tipo focaccia relleno de crema ácida) y los bocadillos.”

La Filosofía del vino de Béla Hamvas es una propuesta vitalista que opone el goce pleno a la abstinencia puritana. A la vez, resulta un ejercicio lúdico para entender esa rara relación que tenemos las personas con los vinos y sus múltiples personalidades. Si el vino de Gyöngyös está “engalanado”, el de Villány es “el vino elegante por excelencia, el de las damas y los galanes. Yo, por mi parte, siempre serviría Villány en los bailes. Es ideal para las fiestas de compromiso. No es en absoluto exigente, tiene un sentido del humor inofensivo, que naturalmente está muy lejos de la sabia alegría del Csopak, pero el Villány jamás pretende ser un Csopak, y un Csopak no tiene el menor interés en asistir a un baile”.

Lanzamiento Baron B Heritage 005

La quinta edición de este espumoso de interpretación libre de Baron B supone una mezcla de añadas 2014, 2016 y 2018, criadas sobre levaduras en el método tradicional. Vino complejo y de burbuja delicada, es un rosé único en su especia en el mercado, a la altura de los mejores Champagnes franceses. Para darse un gusto, vale la pena ($95.000). Y si echaras en falta las ediciones anteriores, la marca propone una caja de madera con las 5 ediciones.

En esta nota

Dejá tu comentario

Las más leídas