¿Qué acuerdo es clave para proteger la marca Patagonia en vinos?
"El beneficio es enorme comparado con ese posible perjuicio", dijo Ana Viola, titular de la Cámara de Bodegas Exportadoras de la Patagonia, sobre el acuerdo Mercosur-UE.
Los productos con denominación de origen como quesos y vinos pueden llegar a ser las estrellas del reciente acuerdo entre el Mercosur y la Unión Europea (UE). Mientras del otro lado del Atlántico celebran las oportunidades que se abren para estos sectores, desde la Patagonia hablan de “un golazo” para los vinos de la región.
En diálogo con +P, Ana Viola, titular de la Cámara de Bodegas Exportadoras de la Patagonia, celebró el acuerdo en el marco de la defensa de la marca Patagonia que llevan adelante las bodegas exportadoras de la región. “Hace mucho tiempo estamos gestionando el reconocimiento mutuo de las indicaciones geográficas de la UE y del Mercosur. Este acuerdo podría ser una puerta para la protección de la Indicación Geográfica (IG) Patagonia y de este modo no tendríamos que estar tan encima de la defensa de la marca”, aseguró.
Viola, quien también es CEO de Bodegas Malma, aclaró: “Te estoy hablando como presidente de la cámara. Para proteger la IG Patagonia y que los vinos que dicen Patagonia sean exclusivamente de la Patagonia, el acuerdo Mercosur-UE es buenísimo, un golazo”.
“Hay una lista de IG que se presentó cuando se iniciaron las conversaciones para el acuerdo, que fue aprobada. En ese momento no hubo ninguna oposición a la IG Patagonia, fue aprobada por la UE y entiendo que va a seguir igual. Eso nos facilita muchísimo porque evitaría que tengamos que estar defendiendo cada intento de registro”, comentó Viola.
Y agregó: “Es una ventaja enorme porque saca la palabra ‘Patagonia’ del Registro de la Propiedad Intelectual y la lleva a otro ámbito, al de la IG. No se puede registrar, tiene una protección extra”.
“Hace poquito se anunció también que en el Mercosur se iba a empezar a implementar la protección de las IG y ahora, con el cierre del acuerdo con la UE, es un golazo porque ampliamos enormemente los mercados donde estaríamos protegidos. Entonces, es una muy buena noticia”.
Copa medio vacía
La contracara del acuerdo, ¿puede llegar a ser la importación masiva de vinos, en este caso? En este punto, Viola opinó que “hay voces que dicen ‘van a venir vinos europeos con pocos aranceles’. La realidad es que en Europa hay mucho trabajo de subsidios y de promoción de la producción y la venta de vinos. Entonces, llegan muy competitivos a todos los mercados”.
“Va a haber más competencia porque va a haber vinos de otros mercados, pero yo creo que el beneficio es enorme comparado con ese posible perjuicio. El mercado que se nos abre a nosotros con mejores condiciones es enorme… Es muy grande y es mucho más atractivo que el mercado que se abre de este lado”, aseguró.
Dicho de otro modo, remató: “Por el poder adquisitivo o la cantidad de gente, la posibilidad que se abre para nuestros vinos es infinitamente más grande, que lo que va a suceder acá en el mercado interno con la competencia de los vinos extranjeros”.
“En el mercado de Brasil, que es muy importante y donde los vinos españoles y portugueses son muy fuertes, también se puede generar más competencia. Pero es un perjuicio versus muchos beneficios”, concluyó.
Todas las voces
El acuerdo incluye la eliminación de los aranceles impuestos por ambos bloques. Desde Europa, señalan que este cambio sería especialmente relevante para países productores de vino como España, Francia e Italia, que verían una mejora en la competitividad.
Sin embargo, no todos los sectores comparten el optimismo. Varios Estados miembros, encabezados por Francia, han mostrado reservas respecto al impacto que la apertura del mercado podría tener en las importaciones agrarias provenientes de los países de Mercosur. Las preocupaciones se centran en la posibilidad de que productos sudamericanos, como la carne de vacuno y el azúcar, inunden el mercado europeo a precios competitivos, poniendo en riesgo a los agricultores locales.
Mientras tanto, el sector del vino europeo, que representa una parte significativa de las exportaciones agrícolas de la UE, ve en este acuerdo una oportunidad para afianzar su posición en los mercados internacionales. La eliminación de aranceles podría traducirse en precios más competitivos y un incremento de la demanda en países como Brasil, Argentina y Uruguay, donde el consumo de vino europeo ha mostrado un crecimiento constante.
En este momento, las negociaciones con Mercosur abren una nueva etapa de comercio internacional. Sin embargo, el proceso de ratificación del acuerdo podría dificultarse debido a la diversidad de intereses entre los Estados miembros y las preocupaciones de los sectores más expuestos a la competencia externa.
En esta nota