Manzana argentina amenazada por la apertura de importaciones

Tras anunciar que habrá facilidades para importar alimentos de la canasta básica con el objetivo de generar mayor competencia y reducir los precios, el equipo de la Secretaría de Comercio trabaja en la lista de posiciones arancelarias de los productos que estarán alcanzados por este beneficio.

El Gobierno está convencido de que los precios de muchos alimentos quedaron demasiado elevados en dólares y que una forma de nivelarlos es abriendo la importación.

Dentro del listado, no se descarta la posibilidad de que esté la manzana, una de las frutas consideradas dentro de la canasta que mide el INDEC. “Estamos trabajando en el tema. En los próximos días quedará definida la primera de las listas”, señaló en forma escueta un funcionario de Economía al ser consultado por + P. Fuentes de la Cámara Argentina de Fruticultores Integrados (CAFI) aseguraron "no tener información al respecto".

El mercado interno argentino es un destino clave para la manzana de producción local. Durante muchos años, fue en los papeles un “mercado libre” para la importación, pero en los hechos terminó siendo un “mercado protegido” a la entrada de oferta de terceros países.

En los últimos años, las importaciones argentinas de manzanas han sido marginales producto de dos variables clave. La primera de ellas fue la falta de dólares en las reservas del Banco Central (BCRA) que impedía que salgan los permisos de importación para determinados productos prescindibles. En segundo término, la participación de una importante empresa del Valle de Río Negro y Neuquén, muy ligada al poder de la última administración, que generaba un poder de lobby importante para que no ingrese la manzana de terceros países al mercado local.

Anualmente la producción del Valle de Río Negro y Neuquén destina al mercado interno un promedio de 250.000 toneladas, por lo que las importaciones hasta ahora no tuvieron un gran impacto en el mercado.

Lo definimos como un importante mercado, porque absorbe anualmente poco más del 40% promedio de la cosecha local de manzana de cada temporada, y Chile tiene un producto que es competitivo para ingresar en nuestra góndolas y es hacia donde hoy miran con preocupación los empresarios del Valle cuando se habla de la posibilidad de abrir las importaciones.

El país trasandino, exporta anualmente un promedio cercano las 600.000 toneladas de manzanas, de las cuales alrededor de 52.000 toneladas -datos del cierre 2023- se orientaron al mercado de Brasil, cruzando en camiones todo el territorio de nuestro país para llegar a este destino.

Es decir que no debería tener ningún problema, si el mercado así lo demanda, bajar parte de esa fruta para sea vendida en las góndolas del mercado interno argentino. La logística, ya la tiene aceitada.

Al analizar el tema precios, la manzana chilena es muy competitiva. Teniendo en cuenta que hoy por un kilo de manzana, en promedio se está pagando en las cadenas minoristas de Buenos Aires, alrededor de 2.000 pesos el kilo -equivalente a unos 2,35 dólares por kilo, datos del mes pasado- los valores FOB de Chile por la oferta de manzana se encuentra muy por debajo de estos precios mencionados.

En la gráfica adjunto se toma como referencia la fruta chilena en el mercado de Brasil, el que más cerca está de pagar el importador argentino por esa manzana.

En definitiva, habría que esperar que las autoridades del ministerio de Economía, liderado por Luis Caputo, definan si considera que la manzana de producción local es “cara” o “barata” para el consumidor argentino como para ser incorporada en este primer listado mencionado. Todo indica que, a la corta o a la larga, el mercado de la manzana dejará de ser cautivo para las empresas locales; un replanteo que deberían comenzar a analizar los ejecutivos de aquellas firmas que orientas gran parte de su oferta comercial hacia este destino.