Guerra comercial entre China y la UE, ahora por los lácteos
China avanza en su guerra comercial con Europa. Los lácteos son el foco de esta nueva disputa. Aranceles sobre los vehículos eléctricos disparó los problemas.
La Comisión Europea llevó ayer ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) la investigación que China ha iniciado contra las importaciones europeas de productos lácteos en contrapartida a los aranceles contra los vehículos eléctricos del gigante asiático. "La investigación china sobre los productos lácteos de la UE se basa en acusaciones cuestionables y pruebas insuficientes", dijo el vicepresidente de la Comisión Europea y responsable de Comercio, Valdis Dombrovskis.
La denuncia ante la OMC se produjo después de que la reunión que Dombrovskis mantuvo la semana pasada en Bruselas con el ministro de Comercio de China, Wang Wentao, terminase sin acuerdo sobre los aranceles que la Comisión ha impuesto de forma provisional a la importación de vehículos eléctricos desde el gigante asiático.
La Comisión considera que la investigación que China inició en agosto contra la importación de productos lácteos de la UE con un porcentaje de grasa superior al 10 % para averiguar si están subvencionados y contra algunos tipos de queso se basa en "pruebas insuficientes". Se trata del primer paso en el procedimiento de resolución de disputas de la OMC, tras el que si no se llega a una solución, la UE podría solicitar a la organización que establezca un panel para analizar la cuestión.
"La Comisión cumple su compromiso de defender firmemente los intereses de la industria láctea de la UE y la Política Agrícola Común contra procedimientos abusivos", señaló Bruselas en un comunicado. Francia e Italia son los principales afectados por la investigación antisubsidios de China, según los los datos de la Administración General de Aduanas del país asiático.
Francia lidera con diferencia la tabla de exportadores europeos de lácteos a China, con 211,5 millones de dólares en 2023 y otros 115,3 millones de dólares entre enero y julio del presente año, mientras que Italia exportó mercancías por un importe de 64,9 millones de dólares el año pasado y otros 43,2 millones de dólares en los siete primeros meses de 2024.
Los siguientes países más afectados son Dinamarca, Países Bajos y España, que vendió a China 49,3 millones de dólares en los productos investigados el año pasado y 27,7 millones de dólares hasta julio en este ejercicio.
La denuncia ante la OMC no afecta a la investigación que China también ha iniciado contra la importación de carne de cerdo, que afecta particularmente a España.
Antecedentes en lácteos
Cabe recordar que el Ministerio de Comercio de China anunció el 20 de agosto una investigación antisubvenciones contra ciertas importaciones de productos lácteos de la UE, lo que se interpretó como una anticipada respuesta a los aranceles impuestos por Bruselas a los vehículos eléctricos chinos.
Según indicó Comercio en su página web, la petición para investigar las importaciones de lácteos europeos a China fue presentada el pasado 29 de julio por la Asociación de la Industria Láctea de China. Las pesquisas se centrarán en los productos importados entre abril de 2023 y marzo de 2024 y en los “daños” que estas compras provocaron al sector chino entre 2020 y 2024.
En el proceso se revisarán productos lácteos como el queso fresco, la cuajada o la nata y los efectos de programas de subvenciones a la industria láctea en Irlanda, Austria, Bélgica, Italia, Croacia, Finlandia, Rumanía y República Checa.
Según Comercio, la solicitud de la patronal china afirma que los productos investigados han recibido subvenciones de la UE y de los gobiernos de sus Estados miembros y que algunas empresas lácteas comunitarias se benefician de hasta un total de 20 partidas de subsidios. Entre las ayudas europeas, el Ministerio cita fondos para la conservación ecológica y subvenciones para jóvenes agricultores, para el almacenamiento de productos lácteos y para el desarrollo rural, entre otras.
La cartera de Comercio asegura que la solicitud de la patronal muestra evidencias suficientes para la apertura de una investigación.
Represalias a los aranceles europeos
La prensa estatal china había avanzado en mayo posibles represalias a los aranceles europeos, entre las que figuraban investigaciones ‘antidumping’ a la carne de cerdo procedente de Europa, que ya se hicieron realidad, y contra los lácteos.
La investigación contra el cerdo europeo, anunciada en junio, afecta especialmente a España, el principal exportador de cerdo a China dentro de los Veintisiete. El anuncio de las pesquisas contra los lácteos del Viejo Continente se produce un día después de que la Comisión Europea (CE) ajustase su propuesta de aranceles a la importación de vehículos eléctricos del gigante asiático.
La CE rebajó del 37,6 % máximo planteado en julio al 36,3 % los aranceles adicionales a la importación de vehículos eléctricos chinos al Viejo Continente. Sin embargo, elevó levemente las tasas impuestas a empresas no incluidas en la investigación de Bruselas, pero que sí cooperaron en ella.
Aranceles para vehículos
El pasado mes de julio, Bruselas propuso la imposición de estos aranceles a los vehículos al considerar, tras una investigación de varios meses, que su penetración en el mercado europeo daña a los productores comunitarios.
En palabras de la presidenta de la CE, Ursula von der Leyen, al anunciar la investigación hace ahora once meses, China inunda los mercados globales “con vehículos eléctricos chinos más baratos”, a un precio que “se mantiene artificialmente bajo gracias a los enormes subsidios estatales”.
China presentó este mes una demanda ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) por las medidas europeas con el objetivo de “defender los intereses” de su industria de vehículos eléctricos y “fomentar la cooperación global en la transición hacia una economía verde”.
Fuente: EFEAgro.
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