Con una oposición cada vez más fragmentada, Milei acelera las reformas

En política la reconocida frase "divide y reinarás", refiere a una estrategia que rompe las estructuras de poder existentes en grupos más pequeños. Cuenta la leyenda que esta máxima latina “Divide et Impera” fue tomada como norma por Julio César y el emperador Napoleón.

Podría ser utilizada en todos los ámbitos, aunque suele ser aplicada principalmente por aquellos Gobiernos que promueven controversias y problemas en la oposición, de modo de fragmentarla en bloques diferentes que se enfrenten entre sí. De esta manera, al momento de celebrarse elecciones o de tomar decisiones frente a una Ley en el Congreso, la oposición divide sus votos totales entre todos los bloques que se generaron previamente producto de ese enfrentamiento, lo que facilita la negociación y el triunfo de aquellos que son Gobierno. Todo basado en el sentido común.

Y es este escenario, el que hoy presenta la política argentina; con el presidente Javier Milei dinamitando todos los puentes de los partidos de la oposición que intentan unificar criterios para poder hacer frente a las reformas que esta impulsando el Ejecutivo.

Pero, haciendo referencia nuevamente a las frases célebres, está claro que “El Tango se baila de a dos”; si bien existe un Gobierno que estimula las divisiones internas en los partidos de la oposición, referentes de estos últimos aceptan las condiciones y participan activamente de este juego de poder.

Increíblemente, la expresidente y condenada por la Justicia, Cristina Fernández, fue empujada -pese a su experiencia política- a ingresar en este juego. El miércoles pasado durante el 47 aniversario de Abuelas de Plaza de Mayo en el Teatro Argentino de La Plata, el Gobernador Axel Kicillof y Cristina Fernández, figuras del peronismo, se sentaron a los costados de Estela de Carlotto. No hubo dialogo entre ambos dirigentes.

Días atrás a este intento de reconciliación por parte de Estela de Carlotto, la expresidente lo había acusado al Gobernador de Buenos Aires de trabajar para la lista de Ricardo Quintela, Gobernador de La Rioja, para la interna que debería definir -en pocos días más- la presidencia del Partido Justicialista (PJ). Fue durante una reunión en la sede de SMATA, que conduce Ricardo Pignanelli. “Los Poncio Pilatos y los Judas en el peronismo no van más”, sentenció la expresidenta de la Nación en referencia al gobernador bonaerense. “¿Alguien se imagina a un ministro de Néstor Kirchner juntando avales para Chiche Duhalde en 2005 o un ministro mío juntando avales para De Narváez en 2009? ¿Qué estás haciendo hermano? Hacete cargo”, sentenció.

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Pese a que Cristina Fernández y Axel Kicillof intentaron disimular el malestar que existe entre ambos, quedó claro que falta mucho para la unidad del partido.

Inmediatamente, Axel Kicillof publicó una carta donde toma distancia de lo que está ocurriendo en el Partido Justicialista y rechaza los cuestionamientos del kirchnerismo. "No me interesa disputar la interna del PJ ni directa ni indirectamente", dijo el gobernador. Recordó que desde que Alberto Fernández se apartó de la conducción del partido viene repitiendo en público y en privado que no le interesa disputar la interna. "Ni directa, ni indirectamente", destaca. Pero agregó, apuntando los dardos a su madrina política: "Tenemos el antecedente de que la lógica de 'sometido o traidor' causó malos resultados".

Kicillof le reclama a la expresidente que asuma algo de responsabilidad del desastre al que llevó a la Argentina su decisión de nombrar a Alberto Fernández como candidato a presidente de la Nación. “Pareciera que de todo lo que pasó en todo este último tiempo Cristina nada tuvo que ver...insólito”, agregó un allegado al Gobernador de Buenos Aires.

Por otra parte, Axel Kicillof es uno de los pocos peronista que puede mostrar algún pergamino en su gestión, al ganar la elección pasada y retener la conducción de la Provincia más importante del país. No es un trofeo menor, que le abre las puertas para dirimir poder con quien se le coloque enfrente, hasta inclusive con Cristina Fernández.

Las expectativas de la foto de unidad que pretendían las bases y el kirchnerismo en el Teatro Argentino de La Plata, no pudo ser. Quedó claro la fractura que hoy existe en el principal partido de la oposición. En la Casa Rosada, todo es festejo.

Casi a la misma hora en que Kicillof le negaba el abrazo a Cristina en La Plata, el bloque de diputados de la Unión Cívica Radical (UCR) anunciaba que se partía en dos. Fue horas después de que el presidente de la bancada, el cordobés Rodrigo de Loredo, apareciera en una foto durante una reunión con otros correligionarios suyos y libertarios colegas de la Cámara, con el vicejefe de Gabinete, Lisandro Catalán, en la Casa Rosada.

Para bajar la tensión de los últimos días, y evitar así el quiebre anunciado, el radical Martín Tetaz había puesto como condición que se realizará una reunión de bloque ampliada y que De Loredo no fuera al encuentro en Balcarce 50. El titular del bloque radical desairó esa demanda interna, y todo saltó por los aires.

Así esa misma noche se anunció que el bloque se dividía en dos. La bancada comandada por De Loredo quedó reducida a 21 integrantes, entre los que se encuentra Mariano Campero, Luis Picat, Martín Arjol, Pablo Cervi y José Tournier; los “radicales con peluca”, como los bautizó la prensa por haber concurrido a la invitación del presidente Milei y formar parte del escudo legislativo que logró impedir que la Cámara de Diputados rechace sus vetos a la mejora en las jubilaciones y al financiamiento de las universidades públicas. Los rebeldes, que conformaron un nuevo bloque, suman 12 diputados.

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Mariano Campero al mando de la selfie con el presidente Javier Milei, el resto de los diputados radicales y miembros del gabinete.

En este contexto, el diputado neuquino, Pablo Cervi, se muestra cada vez más cerca de los referente de La Libertad Avanza (LLA). "Estamos de acuerdo con muchas de las cosas que plantea y, por supuesto, también tenemos nuestras diferencias. Pero este es un momento donde es clave dar un respaldo al Gobierno", confesó una persona muy allega al legislador. La fuente anticipó que "se está estudiando la posibilidad de desembarcar en Neuquén para ocupar un lugar como oposición a la mala gestión de (Rolando) Figueroa. Hoy ese espacio no existe y estamos trabajando para armar nuevas alianzas en Neuquén".

Para el círculo rojo que rodea al presidente Javier Milei en La Casa Rosada, esta semana fueron todas otra buenas noticias, en términos políticos. Peronistas y Radicales sumergidos en discusiones de poder que no están en la agenda de la gente, un escenario óptimo para acelerar las reformas estructurales en el Estado. ¿Qué mas puede pedir el Gobierno?