Crecen las importaciones de manzanas de Brasil
Las importaciones de manzanas de Brasil subieron 18% en esta primera parte del año. La de peras, en baja.
Las importaciones de manzanas de Brasil alcanzaron en este primer trimestre del año las 37.602 toneladas, volumen que muestra una suba interanual del orden del 18% y del 80% en relación con el promedio de las últimas cinco temporadas. Así lo señala la estadística oficial del Gobierno de Brasil, en la que se destaca una clara tendencia al alza en las importaciones de las últimas temporadas.
Sin embargo, hay que señalar que es probable que gran parte de este último crecimiento se deba a los coletazos de la menor cosecha de manzanas que registró el vecino país durante 2024. Es así que, en todo el año pasado, las importaciones de este producto llegaron a poco más de 235.000 toneladas, número que mostró un salto interanual del orden del 53%.
Para la temporada 2025, se espera en el vecino país una cosecha relativamente normal en volumen y de buena calidad, en torno a las 900.000 toneladas, según fuentes del sector privado.
La oferta exportable de manzanas argentinas con destino a Brasil también mostró esta misma tendencia. Según los datos oficiales del vecino país, las colocaciones de este producto provenientes del Valle de Río Negro y Neuquén alcanzaron, en estos primeros tres meses del año, las 6.263 toneladas, un volumen que representa un salto del 36% en términos interanuales y del 21% si se lo compara con las últimas cinco campañas (2020-2024).
Si bien nuestro país ha sido tradicionalmente uno de los principales abastecedores de manzanas del vecino país, en los últimos tiempos ha perdido una importante participación en este mercado. Sin ir muy lejos, la estadística de los últimos años respalda esta afirmación.
Tal como lo detalla el gráfico adjunto, en esta primera parte del año creció con fuerza la participación de la manzana proveniente de Europa en el mercado de Brasil. Seguramente, a partir de abril, esta matriz se modificará sensiblemente con una mayor participación de ventas de Chile y, en menor medida, de la Argentina, desplazando así la oferta exportable del hemisferio norte.
Importaciones de peras, en baja
Las importaciones de peras de Brasil durante el primer trimestre de 2025 alcanzaron poco más de 39.800 toneladas, volumen que refleja una caída del 3% en términos interanuales y una suba del 10% cuando se lo compara con el promedio de compras de las últimas cinco temporadas (2020-2024).
No obstante esta tendencia negativa, las exportaciones de peras argentinas hacia ese destino muestran —en esta primera parte del año— un crecimiento del 6% respecto del año pasado, al pasar de poco más de 33.380 toneladas en el primer trimestre de 2024 a 35.440 toneladas en el mismo período de 2025.
La gráfica adjunta refleja un sostenido crecimiento de las exportaciones de peras argentinas hacia el mercado de Brasil.
Pero al margen de estos buenos indicadores, los números oficiales muestran también que las peras argentinas siguen aumentando su participación de forma muy importante en este destino.
Las estadísticas en este sentido son contundentes. Durante el primer trimestre de 2020, las peras del Valle de Río Negro y Neuquén tenían una ya alta participación en este destino (70%). En este año, ese indicador saltó al 89%. Un dato más que alentador.
Algunas conclusiones
Brasil sigue siendo un mercado clave para la fruticultura del Valle de Río Negro y Neuquén. Las estadísticas así lo confirman. Pero, con la guerra comercial que dio inicio el presente Donald Trump días atrás, es probable que se rompa el actual equilibrio de los mercados frutícolas en el mediano plazo y cambien los flujos de comercio entre países.
De ahí la importancia —y la necesidad— de revitalizar el Mercosur, teniendo en cuenta que es un bloque muy importante que está en la mira de muchos otros países o bloques económicos para poder cerrar acuerdos comerciales. Para la fruticultura regional, será muy importante no ceder espacio en este mercado.
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