Peras argentinas baten récord: 293.600 toneladas exportadas en 8 meses
Las peras explican el 80% de las exportaciones argentinas de pomáceas en 2025. Brasil, EE.UU. y Rusia lideran las compras en un año de fuerte demanda global.
Las exportaciones de peras y manzanas argentinas han mostrado en lo que va de 2025 un desempeño notable, consolidando la recuperación de parte del sector frutícola en el país. De acuerdo con las estadísticas disponibles al cierre de los primeros ocho meses del año —es decir, hasta el segundo cuatrimestre—, las colocaciones externas de pomáceas totalizaron 359.000 toneladas.
Este volumen representa un crecimiento interanual del 6,8% en comparación con el mismo período de 2024, y al mismo tiempo un salto del 8,4% frente al promedio de las últimas cinco campañas (2020-2024). Los números reflejan con claridad una tendencia positiva y sostenida que comenzó en 2022 y se profundizó en los años siguientes. De hecho, tal como lo ilustran los gráficos estadísticos, la curva exportadora de peras y manzanas viene mostrando un crecimiento progresivo hasta rozar los niveles más altos de la última década.
En términos históricos, el avance resulta aún más significativo: si se compara el desempeño actual con el registrado en 2022, cuando las exportaciones de pomáceas se ubicaron en 282.000 toneladas, se verifica un incremento de casi 80.000 toneladas adicionales en un lapso relativamente corto.
Cabe destacar que el volumen exportado en 2025, si bien muy positivo, no constituye un récord. En 2020, por ejemplo, la Argentina logró colocar en los mercados externos unas 375.000 toneladas de pomáceas. Sin embargo, más allá de esta comparación puntual, el escenario actual refleja una recuperación firme, con bases sólidas que combinan dos factores claves: por un lado, una demanda externa sostenida para este tipo de productos frescos y, por otro, una probable mejora en la calidad de la fruta producida en el Alto Valle del Río Negro y Neuquén, principal región exportadora del país.
Récord de ventas para las peras
Al desagregar los datos por especie, surge con claridad que las peras ocupan un rol central en las exportaciones argentinas de pomáceas. Según las estadísticas del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA), en los primeros ocho meses de 2025 las colocaciones externas de peras alcanzaron 293.600 toneladas, lo que equivale al 80% del total exportado en este rubro. El 20% restante corresponde a las manzanas.
El crecimiento de la pera es doblemente significativo: representa un aumento interanual del 3,5%, y al mismo tiempo, un salto cercano al 10% en comparación con los valores promedio de las últimas cinco campañas (2020-2024). Esta evolución positiva llevó a que en la temporada actual se haya logrado un récord de volúmenes exportados al tomar como referencia los últimos diez años.
En cuanto a los destinos, Brasil se consolida como el principal comprador de peras argentinas, con adquisiciones que superaron las 109.400 toneladas, lo que equivale al 37% del total exportado. Este dato ratifica la importancia estratégica de nuestro socio en el Mercosur, que ha sido históricamente el principal mercado para la producción del Alto Valle.
El segundo destino en importancia fue Estados Unidos, con más de 52.200 toneladas adquiridas, seguido muy de cerca por la Federación Rusa, que absorbió alrededor de 51.300 toneladas. En un segundo pelotón aparecen México, con poco más de 14.000 toneladas, y Perú, con 9.200 toneladas importadas. La diversificación de mercados muestra que la fruta argentina ha logrado consolidar su presencia tanto en América como en Europa.
Fuerte salto en las manzanas
El comportamiento de la manzana en 2025 también merece un análisis detallado, ya que muestra un repunte considerable tras varios años de relativa estabilidad. En los primeros ocho meses del año, las exportaciones de esta fruta sumaron 61.100 toneladas, lo que implica un salto interanual del 24% y un crecimiento del 5% respecto al promedio de las últimas cinco campañas.
Los datos históricos muestran que entre 2022 y 2024 las exportaciones de manzanas argentinas se mantuvieron en niveles relativamente estables, sin variaciones significativas. Sin embargo, en 2025 se produjo un salto cualitativo, que si bien todavía no permite alcanzar los niveles de 2020 —cuando se colocaron 86.200 toneladas en los mercados externos—, sí marca un quiebre en la tendencia.
En relación con los destinos, nuevamente Brasil se posiciona como el principal mercado, con compras que superan las 24.600 toneladas, es decir, el 38% del total exportado. En segundo lugar aparece Paraguay, con 9.700 toneladas, seguido por Rusia, que importó más de 6.500 toneladas, y Bolivia, con 4.600 toneladas.
Estos datos confirman que la región del Mercosur continúa siendo clave para la colocación de las manzanas argentinas, aunque también se observa una participación activa de mercados extrarregionales como Rusia.
Una tendencia alentadora
El análisis integral de las estadísticas disponibles permite concluir que la campaña 2025 se presenta hasta el momento como una de las más alentadoras de los últimos años. Los volúmenes exportados muestran un crecimiento sostenido tanto en peras como en manzanas, y al mismo tiempo se percibe una apreciación positiva de la fruta argentina en los mercados internacionales.
En términos globales, la coyuntura internacional también favoreció a los países del hemisferio sur, incluida la Argentina. Durante la temporada, Europa y Estados Unidos registraron menores volúmenes de cosecha debido a fenómenos climáticos adversos como heladas primaverales y granizo, que afectaron las principales zonas productoras del hemisferio norte.
Esta situación redujo los stocks almacenados en dichos mercados, dejando un escenario más despejado para la entrada de la fruta del hemisferio sur, fundamentalmente a partir de marzo de 2025. Como resultado, los precios internacionales se mantuvieron relativamente firmes y en algunos casos mostraron importantes incrementos en las exportaciones, en especial en el caso de las peras destinadas a Estados Unidos. En el caso de las manzanas, el impacto positivo se notó en mercados marginales de Europa y América del Norte, con Estados Unidos y Canadá como destinos destacados.
La campaña 2025 de exportaciones de peras y manzanas argentinas confirma que el sector atraviesa una etapa de recuperación sólida y con perspectivas alentadoras. Si bien aún no se alcanzan los máximos históricos de 2020, los 359.000 toneladas exportadas en los primeros ocho meses del año marcan un punto de inflexión positivo y permiten proyectar que, de sostenerse esta tendencia, la Argentina podría recuperar un lugar de mayor protagonismo en el comercio internacional de frutas frescas.
El crecimiento en volúmenes, la diversificación de destinos y la consolidación de mercados tradicionales como Brasil, Estados Unidos y Rusia, sumados a la calidad creciente de la producción del Alto Valle, delinean un futuro prometedor para las pomáceas argentinas en el escenario global.
Fuente: Redacción +P.
En esta nota