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Proyectan una menor cosecha de peras y manzanas

La comercialización de peras y manzanas muestran mermas significativas. No se descartan caídas importantes en cosecha.

Las colocaciones de peras y manzanas hacia todos los destinos totalizaron, al cierre del primer cuatrimestre del año, las 528.400 toneladas. Este volumen refleja una caída del orden el 12% en términos interanuales y del 5% cuando se lo relaciona con el promedio de las últimas cinco temporadas (2019-2023).

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Los volúmenes de venta tomado para este primer cuatrimestre corresponde a toda la manzana y pera comercializada al norte de la barrera (95% del total) con destino al mercado interno, la exportación y la fruta orientada a la industria. Los datos fueron obtenidos del informe mensual que realiza el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA), de donde se deduce que podría existir una menor cosecha para la presente temporada. Distintas consultas realizadas por +P a empresarios regionales aseguran que existen mermas, aunque nadie quiere arriesgar porcentajes de pérdidas.

Desglosando la estadística oficial se observa que las colocaciones de peras alcanzaron las 353,1 toneladas, reflejando una caída interanual del orden del 9%. En manzanas esa merma alcanza al 17%, un valor no menor a tener en cuenta por empresarios y productores.

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Para poder marca una tendencia algo más precisa, se necesitaría contar con la estadística que brinda la secretaría de Fruticultura de Río Negro con los stocks almacenados de fruta, pero el documento todavía no está disponible por la falta de declaraciones juradas que deberían entregar las empresas.

En estos primeros cuatro meses del año, de las 175.300 toneladas de manzanas que salieron al mercado, un 12% se destino a los mercados externos, 44% a las góndolas locales y 45% a la industria.

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La gráfica adjunta muestra como la industria perdió participación en el total de la comercialización, en relación a la matriz del año pasado. En términos nominales, en lo que va del año, una 79.600 toneladas de manzanas se orientaron a la industria, volumen que representa unas 42.000 toneladas menos que las registradas durante el primer cuatrimestre de 2023. Los otros dos canales de venta (exportación y mercado interno) se mantuvieron relativamente estables, en volumen.

En el caso de las peras, la situación es algo diferente.

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En términos relativos se observa que la exportación tuvo un repunte importante de unos cinco puntos porcentuales , mientras que la industria y el mercado interno mostraron claros retrocesos.

Sin embargo, en términos absolutos la exportación creció tan solo en poco más de 3.000 toneladas y la pera destinada a la industria y al mercado interno cayeron en 26.000 toneladas y 14.000 toneladas respectivamente.

La variable que alentó la mayor exportación de peras fue, sin dudas, las mermas de producción que sufrió la Unión Europea en la pasada temporada, en especial sobre el Mediterráneo, hacia donde se orientó gran parte de la oferta exportable del Valle.

Pese a ello, el principal destino para las peras argentinas sigue siendo Brasil. En esta primera parte del año se colocaron en este destino poco más de 52.000 toneladas -un 3% más que en mismo período del año anterior- volumen que refleja el 34% del total de las colocaciones externas para este producto.

Otro dato de importancia, dentro de las estadísticas presentadas pór el SENASA, es la caida de exportaciones hacia el mercado ruso. En esta primera etapa del año se colocaron 27.600 toneladas, un 26% menos que en el mismo período de 2023.

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