Conocé a la vaca más cara del mundo: ¿qué la hace tan especial y valiosa?
Valorada en más de 4 millones de dólares, la vaca brasileña 'Nelore' domina la lucrativa industria cárnica de Brasil. ¿Qué tiene de especial la vaca más cara del mundo?
Hay vacas y vacas. Algunas son más rústicas que otras; las hay de razas sintéticas; con carne más grasa o con pelajes diversos… Hay más de 30 razas y en este universo se encuentra de todo, incluso la vaca más cara del mundo, una Nelore por la que se pagó 4,3 millones de dólares y que le valió un lugar en el popular Guinness World Records de este año.
Las fotos de esta vaca, proveniente de Brasil, impresionan. Sin dudas es imponente, sus rasgos distintivos incluyen un pelaje blanco brillante, pliegues de piel como "papada" que le brotaban del cuello como una suerte de pañuelo a la moda y una prominente joroba bulbosa por encima de los hombros.
Esta vaca (conocida como Viatina-19 FIV Mara Imóveis), de 53 meses, nació en Nova Iguaçu de Goiás y ya figura entre las mejores vacas Nelore de la historia.
El ingreso de la magnífica Nelore brasileña, descendiente de la antigua raza cebú de ganado doméstico, al Guinness World Records sacó a la luz el impresionante valor del ganado de la raza en Brasil, demostrando que el alto precio que alcanzó en el mercado se debe a sus excelentes cualidades genéticas.
Desde Guinness World Records afirman que “el precio pagado no sólo demuestra la calidad de la raza en el país, sino que también repercute en el mercado mundial de ganado, consolidando la reputación de la Nelore como raza valiosa y codiciada en todo el mundo”.
Para muestra, basta un botón (de 4,3 millones)
El precio de esta Nelore es un ejemplo más del avance de Brasil en el mercado ganadero. El país vecino es el primer exportador mundial de carne vacuna, un primer puesto que alcanzó hace tres años, cuando China empezó a importar de Brasil tras un grave brote de peste porcina africana que mató al 28% de la cabaña porcina del país asiático.
Este puente comercial con el gigante asiático es tan poderoso que Brasil ya construyó cuatro nuevos mataderos para abastecer a ese mercado.
El panorama parece ser auspicioso. La descendencia de Nelore es el cebú preferido, y no sólo por su carne. Este ganado se considera el futuro del sector, tanto por su capacidad de reproducción, su adaptación al clima y por su potencial (dicen) para reducir el impacto ambiental de la ganadería.
Actualmente Brasil cuenta con unos 225 millones de cabezas de ganado y el país parece dispuesto a seguir dominando un mercado que, según las previsiones, crecerá un 35% en los próximos 20 años. Pero ¿de verdad podrán esta raza valorada en millones de dólares marcar realmente la diferencia para la ganadería del futuro?
¿El futuro está por ahí?
Cuando se debate sobre el futuro de la ganadería copa la escena la cuestión medioambiental y en este punto, Nelore o cebú, pero todo el ganado emite metano a través de frecuentes eructos y flatulencias. El metano es más potente y nocivo para la atmósfera que el dióxido de carbono, y los "gases" de las vacas representan el 14,5% de todas las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero, según la Agencia de Protección del Medio Ambiente de EEUU.
En este punto, ¿por qué se afirma que las Nelore pueden ofrecer una salida a esta cuestión? Teniendo en cuenta su capacidad innata para soportar altas temperaturas y sobrevivir a circunstancias difíciles como la sequía, los híbridos de cebú se consideraron durante un tiempo como posibles vacas de cartel para la producción de carne respetuosa con el planeta. Algunas subespecies tienen más músculo, lo que en teoría reduce su impacto ambiental al producir más carne con menos pastos.
La mirada en la genética
En medio de este auge ganadero, Brasil intentó mejorar su ganado mediante cruces con el fin de mejorar la genética. El gran desafío consistía en encontrar animales capaces de soportar el clima tropical y los diversos ecosistemas del país. Las vacas europeas, como las Herefords y las Angus, sufrían estrés térmico y su producción era baja.
El cebú (Bos indicus), originario del sudeste asiático, África y China, era más resistente. En general, el ganado cebú está naturalmente adaptado al calor, gracias a sus grandes y numerosas glándulas sudoríparas que ayudan a mantener la hidratación. Su piel es gruesa y con pelo tupido, lo que la hace menos vulnerable a insectos como los mosquitos.
El cruce con ganado Ongole del distrito indio de Nellore, en el estado de Andhra Pradesh, produjo un ejemplar aún más resistente, la Nelore (en portugués Nellore se escribe con una "l"). De hecho, no solo se adapta mejor al clima tropical, sino que también es una raza resistente a muchas infecciones parasitarias.
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