Por qué se habla del "regreso" del negocio de la ganadería ovina a Neuquén
Tras más de 4 décadas de ausencia, en 2025, la Sociedad Rural del Neuquén volvió a contar con una exposición y remate de ovinos en su feria anual. ¿Qué significa esta novedad?
Luego de 42 años volvieron los ovinos a la Expo Rural de Neuquén, que se llevó a cabo entre el 22 y el 26 de enero en Junín de los Andes, y participaron 4 productores y la Estación Agrozootécnica Campaña Mahuida. ¿Qué dejó la iniciativa?
De los 4 productores que participaron, 3 forman parte de la Cooperativa Agropecuaria de Pequeños productores de la zona Centro de Neuquén (Cabaña Doña Amalia, E.A Campo Agustín y E.A Las Maras), y un productor de Río Negro ( E.A La Angostura).
Se presentaron a remate 15 carneros Merino, 1 Carnero Corriedale, 1 carnero Hampshire Down y 10 borregas Merino, todos los ejemplares de excelente calidad genética, lográndose la venta en remate de 24 animales con un promedio de precios de $290.000.
Más allá de los números y datos de la exposición, es muy significativo el retorno de los ovinos a la rural luego de tantos años y desde varios aspectos. Uno de ellos es la estabilidad del mercado internacional para las lanas finas y una leve recuperación en los últimos dos meses, la necesidad de los establecimientos ganaderos de aumentar la rentabilidad y de diversificar su producción.
El reconocido médico veterinario, Joaquín Ferrería, sostuvo que “recuperar la producción ovina puede aumentar la carga de muchos establecimientos que se dedican a la producción bovina, sin desplazar a la vaca”.
Además, agregó que esta introducción “mejoraría la rentabilidad de establecimientos medianos y hasta grandes que no pueden aumentar su producción metiendo más vacas”.
“Si se maneja bien y se logra una buena señalada, además de una buena producción lanera, los números son por lo menos (sino mejores) que la cría de vacas”, indicó.
“Ojalá esta exposición haya sido el primer paso de una presencia ovina que vuelva a ocupar el lugar que hizo a esta provincia ganadera. Espero que el año que viene se presenten más animales de razas carniceras que empiezan a mostrarse como una opción más que interesante desde el punto de vista económico, sobre todo para pequeños y medianos productores”, reflexionó Ferrería.
Mercado premium
“En el Caso de la Cooperativa de Zapala por segundo año consecutivo logra introducirse en un mercado selecto como nicho premium en Uruguay y de ahí a Italia, consiguiendo muy buenos precios de venta gracias a contar con una certificación de Wild Life Friendly & Regenerative”, señaló el técnico Santiago Trova, del área de Ganadería de la subsecretaría de Producción de la provincia.
“En los mercados actuales y por una necesidad de los consumidores finales de prendas textiles conscientes y con responsabilidad ambiental, se hace cada vez más necesario contar con este tipo de certificaciones que le dan al consumidor la seguridad de saber que se trata de prendas confeccionadas con materia prima de excelente calidad y por sobre todas las cosas que los animales son tratados con rigurosas pautas y protocolos de bienestar animal, por un lado, coexistiendo con la fauna silvestre y realizando un manejo de los pastizales para la regeneración de los mismos; logrando por este último motivo una huella de carbono negativa y en muchos casos ayudando a las empresas textiles a compensar su propia huella”, aseguró.
En la provincia de Neuquén, la ganadería ovina desde hace más de 30 años está en manos de pequeños productores y ya son más de 300 los que trabajan bajo los protocolos del programa nacional de calidad PROLANA. Además, en los últimos años es sostenido el crecimiento de los kilos certificados.
“Las variables son muchas a tener en cuenta, pero para las lanas finas de menos de 21 micras, con trazabilidad y certificaciones, los precios y los nichos de mercado son variados y ávidos de la fibra con estas características hilando más fino. Las lanas de hasta 18 micras son las más buscadas por los nichos de mercado premium de marcas de diseño exclusivo”, agregó Trova.
¿Cómo llegar a certificar?
Un párrafo especial necesita el tema certificaciones y como la mayor cantidad de ovinos está en manos de pequeños productores, se hace necesario a través de líneas de financiamiento accesibles trabajar sobre la aplicación de certificaciones que exige el mercado internacional.
“El potencial de la producción ovina de calidad (no volumen) en Neuquén es muy alto, por lo tanto, fortalecer desde las organizaciones de productores como las cooperativas, la SRN y el estado a través de políticas de estado claras que fortalezcan los sistemas productivos con programas como el de Mitigación de Daños por Predación -que introduce metodologías no letales de control de pumas y zorros-, el Programa de Ganadería Integral y Cambio Climático, y el Incentivo ganadero crean, sumando a la quita de retenciones a las economías regionales recientemente anunciadas, un contexto propicio para hacer florecer no solo la ganadería ovina, sino también la ganadería caprina con la fibra mohair a la cabeza”, opinó.
Y agregó: “De esta manera, se estaría creando la posibilidad de la obtención de la materia prima certificada para crear la industria neuquina del procesamiento de fibras animales, transformando a hilos y prendas a partir de lanas y fibras de lujo; lo que en pocas palabras significa diversificar la matriz productiva de la provincia, pero conscientes de las implicancias del cambio climático y la necesidad de revertir la situación de degradación y desertificación que sufren en general la Patagonia y en particular determinadas zonas de la provincia”.
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