Sequía en Neuquén: $315 millones en refugos para rescatar la ganadería extensiva
¿Puede la trashumancia patagónica sobrevivir al cambio climático sin apoyo estatal? Neuquén responde con incentivos directos a crianceros.
La sequía persiste como principal amenaza para los sistemas ganaderos extensivos en la provincia de Neuquén. La disminución de la oferta forrajera obliga a reducir la carga animal en los campos. El gobierno provincial activa mecanismos concretos para preservar la productividad y la sostenibilidad de la actividad.
El Programa de Refugos Ganaderos entra en su segunda etapa con la veranada en curso. Esta política pública fortalece la capacidad de adaptación frente a las consecuencias del cambio climático. El enfoque central radica en descargar los campos de animales improductivos mediante pagos directos a los crianceros que adhieren.
Inversión y montos de los aportes
Para el ciclo productivo 2025/2026, el programa destina aportes no reintegrables (ANRs) por un total de 315.000.000 pesos. Los productores reciben 225.000 pesos por equino y vacuno flaco y 22.500 pesos por ovino/caprino.
La Secretaría de Producción e Industria impulsa la iniciativa. El objetivo mitiga los daños de la variabilidad climática, en particular la escasez hídrica que impacta la ganadería extensiva.
La primera etapa, denominada “Subida a Veranadas”, abarcó del 1 de octubre al 15 de diciembre de 2025 con el mismo presupuesto de 315.000.000 pesos. Ahora avanzan dos períodos adicionales: “Estancia en Veranada” desde el 16 de diciembre de 2025 hasta el 31 de marzo de 2026, y “Bajada de Veranada” del 1 de abril al 30 de abril de 2026.
La Secretaría de Producción e Industria gestiona integralmente el programa. El Iadep actúa como organismo financiero. Los fondos provienen de recursos provinciales dispuestos en el marco de la emergencia y/o desastre agrario declarado según la Ley Provincial 3117.
Resiliencia productiva como prioridad
La reducción de cargas entre octubre y abril garantiza mayor resiliencia en los sistemas productivos. Esta medida protege los pastizales y asegura la recuperación de la biomasa forrajera en temporadas posteriores.
El programa beneficia a productores ganaderos, personas humanas y jurídicas dedicados a la cría bovina, ovina y/o caprina afectados por la emergencia sequía. Los beneficiarios acreditan titularidad de la hacienda mediante certificaciones oficiales.
La actividad se desarrolla exclusivamente en territorio provincial. Los interesados demuestran tenencia de la tierra. Además, limitan existencias ganaderas totales a 1.500 unidades ganaderas menores (ugm) para venta de ovinos y caprinos, y a 500 unidades ganaderas mayores (UGM) para vacas y equinos de refugo.
Participan también asociaciones de pequeños productores y comunidades mapuches formalmente constituidas y en funcionamiento regular. Invernadores, engordadores e intermediarios habilitados o en proceso por la Dirección de Ganadería acceden siempre que operen dentro de la provincia.
Los crianceros obtienen información y tramitan la adhesión en las Agencias de Producción de cada zona.
Esta herramienta estatal no solo alivia la presión inmediata sobre los campos. Refuerza la sostenibilidad a largo plazo de la ganadería extensiva en un contexto de cambio climático acelerado. La combinación de incentivos económicos y gestión territorial posiciona a Neuquén como referente en políticas de adaptación para la Patagonia.
Fuente: Neuquén Informa con aportes de +P
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