Empresa compra alfalfa en Valle Medio para aumentar sus exportaciones
La firma se propuso, si las condiciones de calidad lo permiten, incrementar un 50% la compra de megafardos a terceros.
El negocio de los forrajes experimentó cambios que van a mejorar su rentabilidad, como la posibilidad de exportar alfalfa a granel sin necesidad de consolidar contenedores en los puertos, y eso ha comenzado a tener sus efectos (positivos) en Río Negro, donde en diálogo con +P directivos de la empresa Nafosa, que tiene unas 1.500 hectáreas de alfalfa bajo riego en la zona de Pomona, anunciaron que la meta que tienen para este año es incrementar en al menos el 50% la compra de producción a terceros. De hecho, esta semana, Nicolás Maico (responsable del vínculo con los productores) mantuvo reuniones con productores de Valle Medio para analizar las condiciones de calidad de su producción.
“Hemos hecho compras también en el Alto Valle, pero el problema es que el precio que se paga es por el producto puesto en la planta (se encuentra en Bahía Blanca) y hasta allá el costo del flete es otro”, manifestó al ser consultado hasta dónde piensan ampliar el radio de sus compras. Sí quedan en competencia los productores de Valle Medio, muchos de los cuales son proveedores habituales de esta empresa de capitales españoles.
Para los productores, las exigencias “innegociables” son que el producto no debe tener más de un 16% de humedad, menos de un 5% de malezas y no debe existir restos de heces de animales. Maico explicó que este año por primera vez se podrá realizar exportación de alfalfa “a granel”, lo que significa que no habrá necesidad del armado previo de los contenedores, con el alivio logístico que ello implica. Se podrán cargar en la bodega de los barcos los megafardos y el pellet que se vaya a vender.
Por estos días, a diferencia de la ganadería donde se reza por un poco más de agua, “el problema es la humedad”, comentó este directivo de la empresa, y buena parte de la charla con un productor de megafardos de Valle Medio giró en torno a ese aspecto, ya que el año pasado no se pudo concretar una operación por exceso de este condicionante.
Nafosa tiene una planta en Córdoba y otra en Bahía Blanca. En la primera, el 100% de lo que se procesa se compra a terceros, mientras que, en el caso de Bahía Blanca, el 40% de la producción es sostenido con la producción propia que sale de los campos aledaños a Pomona. El restante 60% se compra a productores de la región.
“El equilibrio que se debe lograr no es fácil, porque la alfalfa debe llegar a la planta con poca humedad y al mismo tiempo conservar la hoja”, aclaró Maico.
Plenario nacional
En la última Plenaria Anual del Clúster de Alfalfa (PACA), que se realizó entre el 11 y 12 de septiembre en Sinsacate, Córdoba, se anunció a Nafosa como nuevo adherente del Clúster de Alfalfa, una entidad que reúne a unos 110 socios, entre industriales, comerciales, productores y proveedores de insumos.
Maico fue uno de los disertantes de la PACA 2025, según detalló el sitio especializado www.todoalfalfa.com.ar , y en ese marco se anunció que Alfalfa y Forrajes de la Patagonia se transformará en socio estratégico del Clúster de Alfalfa de Córdoba.
Según Maico, la empresa tiene como premisa “no solo abastecer a nuestras plantas, sino también queremos tener la oportunidad de conformar asociaciones que permitan compartir conocimientos y técnicas que beneficien a toda la cadena productiva”.
Sobre las lluvias de los últimos días en gran parte del territorio rionegrino, destacó que “estábamos preparados para comenzar con la recepción de las cosechas, pero este fenómeno climático ha provocado un retraso en el corte programado”, indicó.
Evaluó que en la actualidad existe “un exceso de oferta en el mercado interno”, lo cual podría provocar un impacto negativo en el precio, “escenario que permitiría abrir oportunidades para la exportación, permitiendo acaparar un mayor volumen si se logra mantener un estándar de calidad”.
En cuanto al comercio exterior, consideró en contacto con Todo Alfalfa que “la exportación se mantiene fuerte, impulsada por un ligero aumento en los precios internacionales”. Esto da impulso al sector, donde el crecimiento pareciera no tener techo.
Regar + clima seco = calidad
Esa es la razón de la expansión en Argentina, con un crecimiento de la superficie de alfalfa “que no solo proviene de la producción a gran escala, sino también de la implementación de tecnologías innovadoras y pivots de riego en nuestras tierras en Pomona, donde anualmente se instalan nuevas infraestructuras para optimizar la producción”.
Detalló que en la actualidad tienen 10.000 hectáreas “dedicadas al cultivo”, aunque bajo riego “tenemos 1.500 hectáreas”. Aseguró que, en los campos de Río Negro, “el riego se presenta como la única solución viable para garantizar la producción en una zona donde las precipitaciones anuales apenas alcanzan entre 250 y 300 milímetros. Esto convierte a nuestra área en un espacio ideal para cultivar, minimizando el riesgo de lluvias que pueden afectar la calidad de las cosechas”.
Fuente: Redacción +P.
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